El Poder de la Risa

Los efectos, que algo tan simple como la risa puede llegar a tener sobre nuestro organismo, son realmente fantásticos. Todos sabemos que reírse es algo natural, pero... ¿deberíamos reírnos más?

Un niño está mucho más dispuesto a reírse que un adulto, un pequeño se ríe un promedio de 300 veces al día, mientras que un adulto lo hace entre quince y cien.

La risa tiene propiedades realmente maravillosas, es capaz de curar cientos de problemas y enfernedades como la depresión, la angustia, la falta de autoestima, el insomnio(gracias a una sana fatiga que genera), elimina los problemas de relación, alivia dolores, desestresa, puede ayudar a bajar de peso e incluso a ayudar a mejorar a enfermos de sida y cáncer. Pero

además de todo esto, la risa actúa sobre múltiples estados fisiológicos, pues mueve el diafragma, haciendo que los pulmones muevan doce litros de aire, en vez de los seis habituales, mejornado así la respiración, se fortalece el corazón, se facilita la digestión al hacer vibrar el hígado, se evita el estreñimiento, se mejora la eliminación de la bilis y se estimula el bazo, baja la hipertensión aumentando el riego sanguíneo y además se tonifican los músculos que hay en el rostro.

También es curioso destacar las propiedades desintoxicantes que ésta tiene, descubiertas desde hace mucho tiempo por los antiguos sabios de Oriente. El bienestar espiritual que produce se explica por su capacidad para crear un espacio para estar con uno mismo, ya que cuando reímos nos es imposible pensar. 

Todos estos beneficios creo que son suficientes para convencernos de que sí deberíamos reírnos más. Ahora bien, todas estas propiedades también tienen su base científica, y la encontramos en las endorfinas que nuestro cuerpo segrega al reírnos, de hecho, una simple sonrisa es capaz de activar esta segregación.

Las endorfinas tienen la capacidad de aliviar el dolor, envían mensajes desde el cerebro hasta los linfocitos y otras células para combatir virus y bacterias; mantienen el equilibrio entre el tono vital y la depresión, es decir, de ellas depende algo tan sencillo como estar bien o estar mal y provocan un estado de euforia que es una sensación de felicidad. Además, cuando uno se ríe segrega más adrenalina, lo que potencia la creatividad y la imaginación.

Es por todas estas cualidades magníficas por lo que reírse es realmente sano y en base a esto se ha desarrollado la llamada Risoterapia, técnica psicoterapéutica que como su propio nombre indica está basada en al risa.